Potira itapitanga
Debaixo da lua nova acima do céu nublado em um sábado
à noite ele se aproxima maciamente de casa. A sua frente uma usuária de craque
está parada olhando para cima. Um carro passa por ele e para uns vinte metros
depois da mulher. Ela sai de seu estupor e vai pesadamente ao motorista.
Conversam alguns segundos, entra no automóvel e vão não se sabe aonde. A noite
se vai, a madrugada está no seu fim e ele sai maciamente com seu amigo meio
estabanado. Outra usuária está sentada na calçada, outro carro passa pelos
amigos e para vários metros depois da mulher. Ela se levanta, vai pesadamente até
o carro, conversam, entra no automóvel e se vão.
O dia avança. Chega à sua metade e o Feirarte está
agradável.
Ao dar uma olhada vê uma pomba preta comendo sementes
vermelhas e amarelas no chão cinza. Esquece-se dela e sobe a árvore de verdes
copas irregulares; deita em um de seus galhos.
Observa um homem que sente saudades do amor de sua
vida e chora seco. Edgar Alan Cat mantém seu olhar mesmo não sendo percebido
por ninguém e o homem se esquece do amor, olha ao redor, encanta-se com uma
garota loura de cabelos crespos, dá uma cantada que ela não gostou.
O gato parece sorrir, pula para o chão, fala com Don
Perro de La Mancha e este, parecendo também sorrir, olha o casal; fixa o olhar
na menina.
A garota tinha começado a sair quando para e volta
até o homem, que lhe pega nas mãos e os dois irão se pegarem em algum lugar
sossegado.
Os dois – gato e cachorro – vão até a mesa do dono,
deitam e dormem enquanto Benito bebe algo com goiaba e lê um livro:
Os contos são
viajantes impenitentes. As asas dos contos vão mais além e mais rápido do que logicamente
pudessem crescer. (...) Não existem mais que meia dúzia de contos. Mas, quantos
filhos vão deixando pelo caminho! (...) O conto é astuto. Infiltra-se no vinho,
nas línguas das velhinhas, nas histórias dos santos. Transforma-se
em melodia torpe na garganta de um caminhante que bebe nos botecos e toca
cavaquinho. (MATUTE, 1990).
- Sabe quanto tempo estou lendo este livro?
-
- Tem seis meses e só agora passei da metade. E sabe
quanto tempo gastei para ler a trilogia O Lar da Senhorita Peregrine para
Crianças Peculiares?
-
- Nem um mês. Grandes Sertões: Veredas tem mais de
cinco anos que estou lendo e não cheguei à metade. Também tem muitos meses que estou lendo A Máquina do Tempo, de Siman. E sabe a causa de demorar
tanto?
-
- Porque é bom. Coisa ruim ou “não tão boa” a gente
acaba logo; mas o que bom eu gosto de prolongar. Degustar. Sentir. Pensar.
Um carro para meio distante de alguém de aspecto
sujo. Este se vai pesadamente àquele, conversa rápido com o condutor, entra e
saem para não sei onde. E pela terceira vez me pergunto por que não podem parar
perto... Por que tem que fazê-los ir até eles.
E os Ferrera toca muito bem suas músicas.
Bajo
de la luna nueva arriba del cielo nublado en un sábado por la noche él se
acerca fofamente de la casa. A su frente una adicta está parada mirando arriba.
Un coche pasa por él y para unos veinte metros después de la mujer. Ella sale
de su estupor y se va pesadamente hacia el conductor. Charlan algunos segundos,
entra en automóvil y se van no se sabe
adónde. La noche se va, la madrugada este en su fin y él sale blandamente con
su amigo desmañado. Otra adicta está sentada en la acera, otro coche pasa por los
amigos y para muchos metros después de la mujer. Ella se levanta, se va
pesadamente al coche, platican, entra en el automóvil e se van.
El día
avanza. Llega a su mitad y el Feirarte está agradable.
Echando
un vistazo mira una paloma negra comiendo semillas rojas y amarillas en el
suelo gris. Se olvida de ella y se echa a subir el árbol de verdes copas
irregulares; se acuesta en una de sus ramas.
Observa
un hombre que se echa de menos del amor de su vida y llora en seco. Edgar Alan
Cat sostiene su mirada mismo no siendo apercibido por nadie y el hombre se
olvida del amor, mira alrededor, se encanta por una muchacha rubia de pelos
crespos, le echa un piropo que a ella no le hay gustado.
El
gato parece sonreír, brinca al suelo, charla con Don Perro de La Mancha y este,
pareciendo también sonreír, mira la pareja; fija la mirada en la chica.
La chica
había empezado a salir cuando para y se vuelve hacia el hombre, que le coge la
mano y los dos se van se cogieren en algún lugar sosegado.
Los
dos – gato y perro – se encaminan a la mesa del amo, se acuestan y se duermen
mientras Benito
bebe algo con guayaba y leer un libro:
Los cuentos son viajeros impenitentes. Las alas de los cuentos van más
allá y más rápido de lo que lógicamente pueda crecerse. (…) No hay más que
media docena de cuentos. Pero, ¡cuántos hijos van dejándose por el camino! (…)
El cuento es astuto. Se filtra en lo vino, en las lenguas de las viejas, en las
historias de los santos. Se vuelve melodía torpe en la garganta de un caminante
que bebe en la taberna y toca la bandurria. (MATUTE, 1990).
-
¿Sabes cuánto tiempo llevo leyendo este libro?
-
-
Hay seis meses y solo ahora pasé de la mitad. ¿Y sabes cuánto tiempo necesité
para leer la trilogía El Hogar de Miss Peregrine para Niños Peculiares?
-
- Ni
un mes. Gran Sertón: Veredas llevo más de cinco años leyéndole y no llegué a
mitad. También hay
muchos meses que estoy leyendo La Máquina del Tiempo, de Siman. ¿Sabes por qué demoro tanto?
-
-
Porque es bueno. Mala cosa o no tan buena nosotros acabamos deprisa; pero,
cosas buenas me encanta prolongar. Degustar. Sentir. Pensar.
Un
coche para a media distancia de alguien de aspecto sucio. Este se va pesadamente
aquel, charla rápido con el conductor, entra y salen para no sé dónde. Y por la
tercera vez me pregunto por qué no pueden parar cerca… Por qué tienen que
hacerlos ir hasta ellos.
Y el
conjunto Os Ferrera tañen agradablemente sus músicas.
Ofereço aos aniversariantes
Osvaldo Mayevicz, Dulce Pereira, Vanessa Lessa, Felipe
Wallace, Patrícia Nunes, Luciana Hermógenes, Daniele Roza, Marrione Warley, Nanda
Abrahão, Diana Duarte, Aline Alves, Thays Júnia, Raissa Fernandes, Dalgreis
Lage e minha sobrinha Mariana Cheloni.
Recomendó a
leitura de “Emergencia en los acantilados”, de Javier Villanueva; e “No Canto
Escuro”, de Sued.
MATUTE, Ana
María. Leer es Fiesta – España Cuenta.
Francisco J. Uriz (Org). Madrid: Edelsa, 1990. Los Cuentos Vagabundos.
Traducción libre de Rubem para el portugués.
Escrito
originariamente en español al fin de la mañana de 31 de enero de 2016. Escrito
en las dos lenguas entre los días 12 y 13 de julio de 2016 y 09 a 15 de enero
de 2017.
Um comentário:
Excelente conto, muito inspirador e reflete as nuâncias da vida cotidiana.
Postar um comentário